Los operadores de Bolsa invierten cerca de 30.000 dólares anuales por usuario en suscripciones al terminal Bloomberg, una herramienta esencial que ofrece datos financieros en tiempo real. En un ecosistema donde unos segundos pueden ser la diferencia entre ganar o perder millones, esta inversión es incuestionable para los 350.000 clientes que utilizan el servicio en todo el mundo. Sin embargo, desde la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, el kit básico de herramientas para los mercados ha incorporado dos nuevos elementos clave: las redes sociales X (anteriormente Twitter) y Truth Social. Estas plataformas se han convertido en canales impredecibles donde Trump lanza mensajes, a menudo explosivos, a cualquier hora del día, con el poder de sacudir mercados de divisas y acciones incluso antes de ocupar nuevamente el Despacho Oval.
El uso de las redes sociales como arma de comunicación estratégica no tiene precedentes entre los líderes anteriores, y ha llevado a los operadores a establecer alertas específicas para seguir sus publicaciones en tiempo real. “No es algo anecdótico. Sus anuncios sobre política arancelaria tienen un impacto directo en la inflación, la curva de tipos de interés y las divisas”, explica el economista jefe de Arcano Economic Research. Este contexto ha elevado al máximo la vigilancia en el sector, especialmente entre quienes trabajan con bonos y derivados vinculados a los tipos de interés.
Ejemplos recientes confirman la magnitud de este fenómeno. Este mismo domingo, Trump publicó en X un mensaje cargado de amenazas con claras repercusiones en el mercado de divisas y el comercio internacional. “La idea de que los países BRICS intenten alejarse del dólar mientras nosotros nos quedamos de brazos cruzados ha TERMINADO. Exigimos que estos países se comprometan a no crear una nueva moneda BRICS ni respaldar ninguna alternativa al poderoso dólar estadounidense, o enfrentarán aranceles del 100%. Que se busquen otro ‘tonto’. No hay posibilidad de que los BRICS sustituyan al dólar en el comercio internacional, y cualquier país que lo intente deberá despedirse de Estados Unidos”.
Este tipo de mensajes, plagados de amenazas y un estilo directo, subrayan el impacto inmediato que las palabras de Trump pueden tener en los mercados, obligando a los operadores a integrar sus redes sociales en sus estrategias de monitoreo y toma de decisiones.
La frecuencia con la que Trump utiliza las redes sociales para lanzar advertencias de alto impacto ha generado una cierta inmunidad en la opinión pública, pero los mercados financieros continúan reaccionando con fuerza. Este lunes, el índice dólar, que mide su desempeño frente a una cesta de monedas, se revalorizó medio punto porcentual. Más intensa fue la respuesta a los mensajes que publicó el pasado 25 de noviembre en Truth Social, su propia red social, donde es más activo que en X, la plataforma de su aliado Elon Musk.
En esa ocasión, Trump anunció: “El 20 de enero, como una de mis primeras Órdenes Ejecutivas, firmaré todos los documentos necesarios para imponer a México y Canadá un arancel del 25% sobre TODOS los productos que ingresen a los Estados Unidos. ¡Este arancel permanecerá vigente hasta que las drogas, en particular el fentanilo, y todos los extranjeros ilegales detengan esta invasión de nuestro país!”. Además, amenazó con un arancel adicional del 10% a China si no lograba detener el tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos.
Las reacciones no se hicieron esperar: las divisas de México y Canadá cayeron más de un 1%, un movimiento considerable para una sola jornada. El yuan chino también sufrió retrocesos. Este modus operandi no es nuevo; durante su primera legislatura, Trump ya utilizó las redes sociales para sembrar volatilidad en los mercados, obligando a los traders a estar siempre en guardia. “Solíamos llamarlas bombas de Twitter”, comentó a Bloomberg el gestor de carteras de Wilson Asset en Sídney.
A pesar de la repetición de este tipo de estrategias, su capacidad de generar impactos inmediatos en los mercados subraya la importancia de monitorear sus publicaciones para anticipar movimientos clave.
“Ignoro las noticias, Trump incluido”
Un trader independiente, asegura que no necesita seguir de cerca las declaraciones de Trump, prefiriendo centrarse exclusivamente en los gráficos de precios. “Como trader, ignoro completamente las noticias, Trump incluido. Todo lo que sucede en el mercado se refleja en el movimiento del precio, y eso lo observo en los gráficos. Es cierto que los tuits de Trump pueden mover momentáneamente el mercado, igual que los de Musk u otros, pero esas fluctuaciones se traducen en movimientos concretos en los precios. Controlar una sola variable, como el precio, es mucho más simple que intentar comprender la avalancha de impactos mediáticos”, explica.
No obstante, admite que los exabruptos de Trump pueden influir indirectamente en su estrategia. “Las distorsiones se detectan rápidamente por los incrementos inesperados de volumen, sin una lógica aparente… mucho antes de que el motivo sea conocido por los medios. En esos casos, puedo ajustar mi dirección operativa, pero siempre guiándome por lo que me indican los gráficos, no por las noticias”. Este enfoque técnico es relevante en un contexto donde los movimientos impulsados por Trump han sido notoriamente volátiles. Según la plataforma de trading IG, el índice de volatilidad (VIX), también llamado “índice del miedo”, registró picos significativos tras ciertos tuits de Trump durante su primera presidencia. Esto generó oportunidades para operadores que buscan capitalizar la volatilidad extrema.
Un estudio de 2021, realizado por investigadores de Noruega, la República Checa y Polonia, confirmó que los tuits de Trump desencadenan un aumento de la incertidumbre, incrementan las operaciones y, a menudo, provocan caídas en el mercado de valores estadounidense. En particular, los mensajes que contenían términos como “productos”, “arancel” y “guerra comercial” resultaron especialmente perjudiciales. Una de las semanas más críticas ocurrió en mayo de 2019, cuando una serie de amenazas a China publicadas en Twitter generaron una pérdida de 1,7 billones de euros en la capitalización de las Bolsas.
El impacto no se limitó a Wall Street. Según el estudio, los valores chinos también reaccionaron negativamente ante estas publicaciones, mientras que el oro, tradicional refugio de valor, solía experimentar incrementos, reflejando la búsqueda de seguridad por parte de los inversores. Esto resalta cómo los mensajes de Trump han redefinido la dinámica de los mercados globales, obligando a operadores y analistas a adaptarse a un entorno donde las palabras de un solo líder pueden desencadenar turbulencias económicas significativas.